jueves, 18 de agosto de 2016

El Éxito, se vive en Familia




Ente las múltiples cosas que podemos elegir en nuestra vida, la familia no es una de ella, podemos decir que DIOS es quien hace la elección por nosotros, cuando solemos hablar del éxito pocas veces se menciona, usualmente se habla de dinero, altos cargo, poder, sin embargo, pocas cosas llenan más que estar en un lugar lleno de seres amados y a los que amas,  es un gran motivador pensar en ayudar a la familia, por el hecho que nos mueve el amor, el que ama no mide límites para lograr sus cometidos, el miedo, amor y odio son los mayores motivadores que puede tener un ser humano para realizar sus obras, es por esto que cuando amamos hacemos desde cosas que se creían imposibles, hasta grandes estupideces.

Pero ¿Cómo se relacionan? Con nuestros seres amados podemos tener infinidad de recuerdo, lo usual es que sean buenos, sin embargo, nuestros padres son los responsables de un gran porcentaje de nuestros traumas, complejas incluso problemas psicológicos, tienen un rol tan determinante en nuestra formación, que nuestra personalidad de niño es un constante asimilar lo que nos dicen y aprender de los ejemplo que nos dan, esto por ser los que están a nuestro lado en la etapa de mayor aprendizaje, donde el cerebro es más plástico y realiza la mayoría de las conexiones que van a necesitar luego para su desarrollo.

Es decir, nuestros padres, son los que pueden formar y promover nuestro éxito, ser el vehículo que nos lleve a ver realizado nuestros sueños, ser el catalizador de nuestra vocación, ellos tienen la capacidad de educar a un artista, o un abogado frustrado.

A estas alturas te recomendaría encarecidamente que leyeras el libro de Robert Kiyosaki, Padre Rico y Padre Pobre (Dejo la dirección al final del post) , el lo explica mejor que yo, no todos tenemos la dicha que nuestros padres biológicos sean nuestros padres Ricos, y cuando hablamos de padres ricos, no es que son adinerados, sino los que creen en nuestros talentos y dones, los pulen y nos ayudan a descubrir nuestra vocación, son esos que ven en nosotros, lo que más nadie ve, o se toma el tiempo para ver.

Como individuos, no podemos pretender cambiar a los demás con solo palabras, de hecho nuestra percepción del mundo no es una verdad absoluta, solo una manera de ver las cosas, de las muchas que existen,  esto se refiere a que el mundo cambia cuando lo observas, y la única manera de cambiar al mundo, es observarlo de una manera distinta, para hacerlo, debemos pensar de otra manera, el cambiar nuestra manera de pensar, cambia nuestra manera de actuar y de hablar por ende nuestra realidad se hace distinta, cuando somos distinto, podemos observar que el caos que tenemos por familia comienza a tener otro aspecto, es difícil entenderlo del todo, pues DIOS fue quien hizo la elección, y que podemos esperar de alguien que nos dicePorque no son mis pensamientos vuestros pensamientos, ni vuestros caminos son mis caminos ” Isaías 55:8 por lo tanto entenderlo con nuestra razón es bien difícil, por no decir imposible, sino eres creyente, te diré, que no tiene sentido buscar patrones en un evento producido aleatoriamente con una frecuencia única.

   Si nos esforzamos por lograr el éxito laboral, no tiene ningún sentido no lograr una sana convivencia con nuestro padres y hermanos, después de todos son los que nos aman con sinceridad incluso antes de conocernos, son nuestras bases, y en la medida que los aceptamos y dejamos de comprar nuestra realidad y comenzamos a vivir la que tenemos, se nos hace más fácil, arreglar y convivir lo mejor que se pueda con nuestra familia aun cuando no sean nuestros Padres Ricos, es vital para poder tener una vida plena y feliz, sin ataduras al pasado y con un lugar lleno de seres que nos aman al que siempre podremos llamar hogar.

Ahora otro punto importante, es que nosotros tenemos que vernos en un futuro Padres, Madres, por lo tanto comenzar a trabajar por ser un padre rico, debe ser una meta de vida, un horizonte al que caminar a diario, no seamos el vehículo que lleve a nuestro hijo a sus metas, seamos el cohete que los lleve directo al cielo donde puedan tocar sus sueños y verlos hechos realidad, una base solidad llena de amor que los abrace al dormir y los motive al despertar, un ejemplo para su vida, una mano que siempre encuentren en sus fracasos y la sonrisa que ellos vean en sus éxitos, transformemos nuestra vida de manera de vivir plenamente, amar lo que hacemos, encontremos nuestra vocación y luchemos por lo que queremos, que esa energía transformadora sea contagiosa, y sea la que corra por la sangre de nuestra descendencia, seamos Padres Ricos.




http://www.colegioloyola.edu.gt/sites/default/files/Padre-Rico-Padre-Pobre.pdf 










No hay comentarios:

Publicar un comentario